Introducción
A Bob y a mí nos gustaría decir al comienzo de La Vara del Pastor de este año, que las revelaciones que vinieron durante la temporada de Expiación no fueron necesariamente lo que estábamos esperando, pero claramente es lo que se necesita. En breve, este próximo año será un tiempo de finalización y un tiempo de comisionar.
Mucho del trabajo preparatorio que ha estado ocurriendo dentro de muchos del pueblo de Dios, será traído a un lugar de plenitud o finalización en esta próxima temporada en preparación para “cruzar” a la tierra de las promesas cumplidas. Sin embargo, aunque un modo preparación continuará, estos días también estarán marcados con visitación divina e impartición personal.
La obra de refinamiento del Espíritu Santo continuará hasta el regreso del Señor. Sin embargo, existen encrucijadas en la historia humana marcadas por visitación divina y derramamiento espiritual que genera una cosecha de almas y mayores medidas de verdad y entendimiento en la Palabra de Dios. Esto es logrado a través de individuos que se han rendido a Dios y se han convertido en administradores dignos de confianza de Su revelación y poder.
Hemos llegado a tales encrucijadas que actualmente están frente a nosotros. Debemos tomar cada oportunidad para permitirle al Espíritu Santo cernir de nuestras almas cada obstáculo y estorbo potencial. Como David clamamos:
Examíname, oh Dios y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos; y ve si hay en mí camino de perversidad, y guíame en el camino eterno. Salmos 139:23-24
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